NACIÓ LA POLICÍA PORTEÑA

La Legislatura de la Ciudad aprobó el nacimiento de la Policía Metropolitana, que tendrá competencia en todo tipo de delitos. Es una de las apuestas clave de Mauricio Macri para disminuir la inseguridad. Un poco de ingenuidad, un poco de marketing político o ambas cosas.

Lo cierto es que la Ciudad de Buenos Aires tendrá su propia Policía. La Ley que da nacimiento a la policía poreña es una ley marco de seguridad pública que es el resultado del consenso arribado por los bloques PRO, Frente para la Victoria y Partido Socialista. Dicha ley también prevé la creación de un Instituto Superior de Seguridad Pública donde se formarán los futuros agentes y de donde saldría la primera promoción en octubre de 2009.

Pero la Policía de Macri no tendrá que esperar hasta esa fecha para estar en la calle. El Jefe de Gobierno convocará a agentes de otras fuerzas. La Ciudad de la Furia ya ha dado conocer, en el mes de agosto, cual será el aviso: "Se necesitan gendarmes, policías y/o efectivos de seguridad de ambos sexos, de entre 20 y 35 años, sin antecedentes de mala conducta ni sumarios internos. Requisito: título secundario completo y aptitud física-psíquica para el desarrollo de tareas de seguridad".

La norma votada no es el reflejo de lo que Macri quería para su policía. El consenso al que tuvo que arribar el PRO con los Kirchneristas del FPV y del Partido Socialista logró entre otras cosas que la policía tenga dependencia orgánica del Poder Ejecutivo, que la conducción de la fuerza esté a cargo de un jefe, con rango y atribuciones de subsecretario, quien será designado por el jefe de Gobierno, que haya un escalafón único (es decir que no habrá oficiales y suboficiales) , que los aspirantes deban aprobar los cursos de formación en la academia policial, que no podrán pertenecer a la fuerza quienes registren condenas por violación a los derechos humanos, o por cualquier delito doloso, tengan un proceso penal pendiente, pertenezcan a las Fuerza Armadas o hayan sido echados de alguna fuerza de seguridad. Además, la norma contempla la creación de Foros de Seguridad Pública, como ámbitos de participación comunitaria, pero que deberán ser creados por una ley especial. Estos logros no son menores.
Claro, el problema es que la Policía estará en las manos de Macri, en las de su Ministro de Seguridad y será auxiliar de su Fiscal General Germán Garavano. Y, entonces, el problema es que son quienes intentaron y, en parte, lograron criminalizar la protesta estudiantil, quienes desalojaron por la fuerza a cartoneros de Barrancas de Belgrano, quienes reprimieron docentes, quienes persiguen artesanos y vendedores ambulantes y procesan a dirigentes sociales que organizan movilizaciones.

En el corto plazo, esta policía se nutrirá de policías de otras jurisdicciones que vendrán con vicios adquiridos y formación aprehendida en otros lares, con la costumbre de un profundo desapego a la convivencia democrática.

ESTAREMOS EN MANOS DE UN REJUNTADO DE POLICÍAS QUE COMPETIRÁ POR EL DOMINIO DE LAS CALLES CON LA FEDERAL.