martes, 21 de septiembre de 2010

LA COMISIÓN INVESTIGADORA ESPECIAL EN SU LABERINTO

Como si se tratara de una interminable zaga de enredos, la Comisión Investigadora Especial (CIE) de la Legislatura porteña no encuentra el rumbo, virtualmente paralizada, se enreda en su laberinto.
Desde su concepción hasta su puesta en funciones la "Comisión" no logró hacer pie. Concebida como la herramienta necesaria para esclarecer la red de espionaje ilegal montada en el seno del Gobierno de la Ciudad sólo ha servido para que asistamos a un circense espectáculo de chicanas en donde los protagonistas estelares son los Diputados del PRO.
La CIE iba a realizar en el día de ayer su primera ronda de testigos. Para ello, había citado a funcionarios judiciales de la Ciudad, autoridades universitarias, entre otros. Nadie acudió a la cita y la Comisión Investigadora hizo el rídiculo, de eso no hay dudas. Un acierto de la estrategia macristas que busca vaciar a la CIE.
Sin embargo, no todo es estrategia, habilidad e inteligencia macrista. Hay que decir que la oposición le viene "errando al vizcachazo". La resolución de citar a testigos de los que podría presumirse su renuencia a colaborar con la "comisión" es una torpeza inadmisible. Más lo es, sobrevalorar su propia competencia al pretender que funcionarios de la Universidad Nacional de La Matanza se sometan a un interrogatorio bajo juramento, siendo que es el Congreso Nacional el único que puede obligar a comparecer en su seno a funcionario de universidades nacionales. En el mismo sentido, la convocatoria a prestar declaración testimonial al Fiscal General de la Ciudad constituye una "paparruchada" de los diputados y diputadas de la Ciudad. En efecto, el Fiscal General es uno de los titulares del Ministerio Público y por tanto integrante del Poder Judicial, en tal carácter, interviene en todos los asuntos que sean llevados ante el Tribunal Superior de Justicia representando el interés de la Ciudad de Buenos Aires ejerciendo el control de legalidad de los procesos y procedimientos. Lo que olvidaron en la CIE que cualquier controversia que surja de las actuaciones de ella misma deben ser llevadas a estudio del Tribunal Superior, y que, en caso de llegarse a la promoción del juicio político al Jefe de Gobierno, su supervisión también estará a cargo del Tribunal Superior y, quien deberá intervenir es el Fiscal General. ¿Era necesaria su citación?
La Comisión Investigadora Especial es legal, tiene fundamento en la Constitución de la Ciudad, pero carece de legitimidad. Una legitimidad que ha sido menoscabada por el accionar del macrismo y que la oposición no pudo, no supo o no quiso resolver. Es la política la que falla, la que no logra que la discusión y la investigación se produzca en el marco institucional de consenso y racionalidad. La falta de apoyo y movilización por parte de una porción importante de los porteños o, de sector social alguno, contribuye a esa falta de legitimidad y permite las maniobras del PRO. La política es la que no está dando las respuestas adecuadas.
Esta cuestión surge indubitable cuando recordamos lo sucedido en ocasión de la tragedia de Cromañón, cuando funcionó una irregular Comisión Investigadora en la que no se permitió la participación de legisladores oficialistas, pero que contó con cierta legitimidad.
Es de esperar que no se cumpla con aquel vaticinio de Marx que aseguraba que "la historia se repite primero como tragedia y después como farsa".

4 comentarios:

el arista arrepentido dijo...

HA vuelto compañero. Muy bueno, la verdad es que uno siente una ran decepción cuando ve e funcionamiento de la investigadora. Nos vemos el viernes en el Bauen, me llegó la invitación al lanzamiento de la Corriente Abierta de Participación. Abrazo.

Anónimo dijo...

Brillante la entrada, Didi. Y agregaría algo. Los análisis contrafácticos suelen ser inconducentes, abstractos y/o antipáticos. Pero para este caso me pregunto si en un escenario de Sala Acusadora, de cara a un futuro Juicio Político, la actitud de los testigos y la "legitimación" de la investigación hubiera sido la misma. Yo creo que no y de hecho era esperable que esto sucediera. Aqui lo dictámenes que se produzcan no serán vinculantes, en cambio al final del camino de la Acusadora se vota por si o por no. Y el "no" equivale a suspensión en el cargo.
Insisto con mi hipótesis de principio de año: la oposición dura no sabía y no se animaba a jugar al JP; y a la oposición blanda no le convenía jugar a todo o nada en un JP, y suponía que en este escenario obtendrían mejores dividendos con el efecto "lijadora". Lo que no previeron, ni unos ni otros, era que se les volviera en contra.

NESTORIUS dijo...

Me podés mandar más imformación de la corriente Abierta de participación. Gracias.
nestorrgarcialio@yahoo.es

DIDÍ dijo...

Anónimo, gracias.
altoliniers, te mando mail y te comento.

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